Yo apoyo a Dinamarca

lunes, noviembre 07, 2005

Cuatro, tres, dos, uno... Cuatro

Señoras y señores, con todos ustedes la rana Gustavo (léase Maleni Álvarez, la perseguidora de Cajasur, el azote de Castillejo). Qué bien da en cámara Gustavo, o mejor dicho Gustava. Tan micrófono en mano. Tan puesta, tan coqueta, un poquito nerviosa, eso sí, sería por el estreno claro, por el estreno de la Cuatro quiero decir. Relatando pormenorizadamente, con información privilegiada, la de la ministra, claro está. Contándonos cómo sucedió, chupando cámara, rellenando informativo. Es usted un figurín.
Y mientras, en el lado oscuro, la cadena afín, perdón amiga decía la publicidad, no emitía informativos. ¡Qué lujo! ¡Qué inicio! Sin oposición, así, así es como hay que hacer las cosas. Con enemigos como esos no les harán falta amigos.
Se diga lo que se diga,
qué bonito es un comienzo,
con su logotivo blanco,
con su logotipo negro,
con su huelguita en la cinco,
y su ministrita dentro.
Y nada, desde Almuñécar, ciudad de la tragedia, les habló para la Cuatro, la Única que deberá estar sintonizada en sus televisores desde hoy, la rana Gustava, la reportera más dicharachera de este país.

domingo, noviembre 06, 2005

La probable

Ayer debí ser malo, muy malo y Dios me ha castigado con la lectura de la entrevista en ABC a Pascual Marragall (Elionoro para los amigos). Ahora resulta que tenemos 3 naciones y una probable. No, si al final va a resultar que España no es una nación. España se tendría que definir según Pac como un ente en el que los sentimientos ajenos se mezclan con los propios que le son inherentes. Es decir, España es un conglomerado de corazones aleatorios que convergen en la suposición de un monolítico y superfluo almanaque de años que la formaron y de sienes que la pensaron. Es un sí y un no al mismo tiempo. Es un producto de la suma de raciocinios, de la resta de desperdicios y la división de todo aquello que le fue potenciado por los diferentes exponentes que la derivaron ¿Eso es España Maragall? Eso es un bodrio señor, como su entrevista. Un castigo para mis ojos; un delirio para mis sentidos; una estupidez para mis pupilas; una borrachera para mi boca (¿le suena?); una lesión para mi espalda; una tortura para mi cuerpo ¿a que esto le suena mejor? Sí, señor Pascual, deje de decir tonterías sin sentido, deje de definir lo definido, deje de embrollarlo todo por un coche oficial y... piérdase en la noche de los tiempos. Petardo.

sábado, noviembre 05, 2005

La cuna

Decía el cartel de la película que la mano que mece la cuna es la mano que domina el mundo. Y ahora, de la Vogue, se saca de la manga que alguien mece la cuna de los conflictos laborales. No, si ahora va a resultar que los obreros son unos fascistas y mediocres incultos que se dejan convencer por las consignas del PP y de la COPE, que digo yo que serán las manos a las que se refiere. Estos tíos de la España del diálogo y del talante se vuelven majaras en cuanto alguien les lleva la contraria ¿o es que ZP les hace decir tonterías para que no se fijen en el vacuo discurso que pronunció en el Parlamento? Yo no sé ustedes, pero yo empiezo a pensar que sí, que todo lo que hablan estos mastuerzos de tres al cuarto son sólo guiones para levantar cortinas delante del presi y que así nadie roce su tersa piel de pipiolo. Pero si hasta en el BOE gana Rajoy, vamos salvo que lo cambien.
No creo que a los mineros pueda moverlos la derecha, vamos, no es que no lo crea, trabajo en una zona minera y el que asegure eso, de verdad, o es un inculto o lo que es más grave, un malasangre ¿con qué se queda usted señora de la Vogue?
PD. Nos han admitido en la red ANTIZP, entrad en ella, es como rozar el cielo en la tierra.

jueves, noviembre 03, 2005

Todos contra la COPE

Vamos a ver señores parlamentarios, me parece a mí que no se leyeron ayer el Orden del Día. Ayer debían ustedes de hablar sobre el Estatuto de Cataluña, sobre el afán independentista de 8 pelagatos y poco más. De la subyugación que España le debe a los catalanes y demás cositas que ustedes ya conocen. Pues parece ser que no, parece ser que el señor Labordeta se colocó la mochila al hombro y no se enteró de lo que se hablaba ayer, la cuestión primordial: criticar a la COPE.
Pero la palma se la llevó cara-durán y Lérida, ese señor que es tan cristiano y tan bueno. Ese ente abstracto que deambula y vive a nuestra costa desde hace tantos años. La culpa es de la COPE de todo lo que pasa en España y el peor Federico. ¡Pues buenos estamos!. De manera que Zapatero no tiene nada que ver. El hombre que nos ha traído el deshonor y la deshonra, el que sacó a nuestro Ejército por la puerta trasera de Irak; el que subió al poder sobre 192 cadáveres y muchas preguntas sin contestar; el que escuchaba a Mozart mientras 11 personas morían en Guadalajara; el que se ha vendido a ETA; el que dinamita a España a diario; ese, nada tiene que ver.
Señores del Parlamento, sean más serio. Señor Labordeta, vuelva a recorrer España, y no la deje que salga de su mochila, pronto, sólo podrá recorrer la comarca de Ribagorza. Y señor Durán, por favor, deje de insultarnos. Soy católico, creo en Dios y en Federico y en usted, como comprenderá nada de nada. Piérdase, esfúmese, medialengua.

miércoles, noviembre 02, 2005

De rodillas

Así me siento, arrodillado, sintiendo el frío cañón apuntando a mi cabeza. Así me siento, humillado, mientras destruyen mis ideas y mis pensamientos. Señores diputados, ¿no les da vergüenza? Especialmente a los del PSOE, ¿no se avergüenza de tener los pantalones a la altura de las rodillas mientras los destruyen? Dicen que el Ché dijo que prefería vivir de pie antes que morir arrodillados. Esta izquierda siempre igual, reescribiendo la historia. Pues bien señores, ni Ché, ni leches, la frase fue dicha mucho tiempo antes en el Parlamento de España (sí, sí, de España, ¡qué hermosa palabra!) por Calvo Sotelo, ¿que no saben quién es? Yo les refresco la memoria. Pronunció a principios de julio de 1936 un discurso contra la izquierda y ésta, representada en La Pasionaria, sólo supo decir: "acaba usted de dirigir su último discurso en este Parlamento" a lo que él, sin temor respondió: "prefiero morir con honra a vivir con vilipendios" ¿les recuerda a algo? Tampco era suya, la verdad, años antes, El Gran Capitán, aquél que tanto trajo a Castilla había dicho: "prefiero vivir dando un paso al frente que dos atrás".
Que ¿porqué les cuento todo esto? Porque hoy hemos sido vilipendiados, hoy hemos sido arrodillados, hoy hemos dado dos pasos atrás. Hoy Cataluña ha hablado de tú a tú a una nación, a una gran nación, ¿o es que ya no lo es? Hoy Cataluña, representada en 8 Diputados ha arrodillado ante sí a 343 Diputados ¿Cuándo acabará todo?, ¿cuándo dejarán de humillarnos?, ¿porqué señor Presidente, porqué? Denos un respiro y guarde ya su cobardía, esconda su equipaje bajo el asiento y lárguese. Si ya no quiere a España, fúguese a Venezuela o a Cuba, a las que tanto añora. Pero pronto, espero que muy pronto, alguien deje de dar pasos atrás y se presente voluntario para salvarnos. Lárguese...

martes, noviembre 01, 2005

La alianza de incivilizados

Esta es la Alianza que busca nuestro presidente, la muerte suicida de un niño para asesinar a un hombre. Sí señor presidente, esta es la "civilización" con la que usted pretende aliarse. La de la muerte y el odio, la del rencor, la de los trozos de carne despedazada de un niño que sólo debería pensar en bajar a la calle a jugar con los amigos. Señor presidente, salga ya de su error, o es tan ignorante que no lo ve. Decídadese de una vez y aléjenos de los fantasmas de estos cobardes de medio pelo con los que se junta. Conviértase en un hombre de bien y deje ya de hacer que nuestras tripas se revuelvan por apoyar a los que apoyamos.
Por favor, señor presidente, se lo suplique de rodillas si usted así lo desea. Deje de humillarnos, deje de hacer que otras naciones nos vean como las ratas cobardes que huyen de un infierno en el que los niños ¡de unos diez años! se suicidan en el nombre de un Dios que, de existir, debería morir. Señor presidente ¿le parece esto normal?, ¿en su lógica entran este tipo de acciones? O es que es usted tan cobarde que prefiere que un niño muera por el bien de una religión. Por favor, señor presidente, no me haga vomitar otra vez más.