El Santo Carod

No se lo van ni a imaginar ustedes, vamos para mí, Carod al lado de Zapatero es un Santo. Las razones son variadísimas pero la principal de todas es que Rovira pactó con los terroristas que no mataran en Cataluña y cuando lo descubrieron reconoció que era verdad. Hoy nos levantamos y leemos que ETA no va a atentar contra los políticos ¿creen realmente que no es algo negociado por nuestro presidente Rodríguez? Yo no es que lo crea, lo aseguro. Este tío miente hasta cuando dice la verdad y eso es terriblemente peligroso en un gobernante.

Estamos acostumbrados a que los políticos mientan, a que no digan la verdad, a que nos oculten parte de lo que saben, pero lo de nuestro presidente supera todos los límites imaginables. Este tío ha pactado para que no lo maten, seguro, seguro. Este tío huele ha podrido y lo peor es que huele principalmente por la parte trasera, justo donde la espalda pierde su casto nombre.

Que pueden matarme los islamistas, pues lo soluciono trayéndome a las tropas, no sea que un día un suicida se estrelle contra La Moncloa y me mande al otro barrio. Y mientras americanos, australianos, británicos, polacos, italianos, etc. se juegan la vida, pues nosotros, para salvar el culito del señor presidente quedamos como unos cobardes y gente de poco fiar en todo el mundo. Que me pueden matar los etarras, pues rompo el pacto antiterrorista y que no maten a más políticos, eso sí, a los policías, militares y guardias civiles, que los zurzan.

Pues bien, señor presidente, desde aquí, desde esta humilde bitácora le digo que es usted una hembra de gallo, de menor tamaño que éste, cresta pequeña o rudimentaria, cola sin cobijas prolongadas y tarsos sin espolones, sobre todo sin espolones, vamos, lo que toda la vida se ha conocido como un gallina y a ello le añado yo despreciable.